4 de marzo de 2008

Lo que mi madre no me contó cuando yo era pequeñita.


Mi madre es una gran mujer, “Yo quise a mi madre” (eso me preguntaron en un test de verdadero /falso) y es cierto que yo la quiero muchísimo teniendo en cuenta sus cosas buenas y malas, pero he estado pensando que mi madre cuando yo era pequeña hubo muchas cosas que no me dijo. Ella nunca me explicó porque la luna flotaba y con el tiempo tuve que enterarme de que no estaba sola en el mundo, que había más gente, que yo vivía en una masa de oscuridad y que yo era una pequeña partícula insignificante que no se vía ni con lupa. Mi madre nunca me dijo que cuando cumpliera 13 años se me llenaría la cara de granos, el cuerpo de pelos y sangraría una vez cada 28 días (más o menos) durante 8 días (lo juro, me desangro cada vez), seguramente por miedo a que me suicidara tras enterarme. Mi madre nunca admitió que los reyes magos no existían, prolongó la mentira hasta que se hizo insostenible. Mamá nunca me dijo que estudiar fuera tan complicado y cansado, cuando era pequeña me daba folios y me hacía pintar pero nunca sumar, restar, dividir, analizar frases, logaritmos, genética… Nunca me hizo preocuparme por mi aspecto, es más, me llevaba despeinada y vestida con ropa grande y cuando me apetecía ir disfrazada de princesa a la calle o engominada con jabón simplemente me dejaba. Mami nunca me contó que cuando eres mayor la gente te pide explicaciones de lo que haces y que jugar con muñecas o sacarse los mocos en publico está muy mal visto. Tampoco me dijo que aparece una cosa que se llama apetito sexual, que te trae de cabeza y se auto invita sin avisar. Mi madre no me enseñó que beber mucha coca-cola trae gases y hace crecer el culo. Nunca me dijo que cuando eres adolecente lloras más de lo normal, tienes problemas personales y jugar con cometas queda prohibido. Jamás me explicó que cuando la gente es adulta deja de hablar sobre caracoles, dibujos animados, cacas, pedos, chistes tontos, superhéroes, plastilina y playmobil. Que después de unos años dejan de caerte los dientes y ya no viene el ratoncito Pérez, si no que eres tú quien va al dentista para que te haga daño al quitarte muelas careadas. Mamá nunca me contó que el primer amor rompe el corazón y que este tarda años en sanar… Mi madre no me dijo lo que estaba bien o estaba mal respecto a mi vida, respecto a la de los otros es otro cantar, si no que la sociedad me ha hecho darme cuenta que si hubiera podido elegir nunca me hubiera hecho mayor… Echo de menos la ignorancia de cuando era pequeña.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me referia la la imagen del texto, pero ya lo he averiguado xD

Gracias, de todas formas probare a cambiar esa.


Dark kisses!!!

Kasha

Marieta dijo...

Por si te sirve de consuelo, la mayoría de la gente al hacerse mayor sigue hablando de xorradas!!
Jajajajaja!
Muakis!